El elenco y el staff están trabajando intensamente para arribar al estreno, en el íntimo espacio escénico de La Juana, su habitual sala. Foto: Pablo Aguirre
8.13.2009
De las Artes se mete con “Stefano”
Creadores de arriesgadas e innovadoras puestas, el grupo teatral santafesino se le anima esta vez a la obra más destacada de Armando Discépolo. El estreno es este sábado, desde las 21, en La Juana.
De la redacción de El Litoral
cultura@ellitoral.com
Este sábado 15 de agosto a las 21, el grupo De las Artes estrena “Stefano”, una obra considerada una joya del teatro nacional. Su autor es Armando Discépolo, hermano de Enrique Santos (Discepolín), creador de “Cambalache” y tantos otros tangos de fuerte actualidad. Considerada la obra cumbre de su autor, y una de las máximas del teatro argentino moderno, “Stefano” es presentada por el grupo teatral de las Artes, con un elenco de excelencia: Raúl Kreig (Stefano), Sergio Abbate (Esteban), Camilo Céspedes (Radamés), Vanina Monasterolo (Ñeca), Cristina Pagnanelli (María Rosa), Claudio Paz (Don Alfonso), Marina Vázquez (Margarita) y Rubén von der Thüsen (Pastore). El “Stefano” del grupo teatral De las Artes lleva la firma de Carlos Falco y Verónica Bucci, una dupla de directores que aúna experiencia e innovación.
“Como toda obra genial de autor genial, “Stefano’ es a la vez sencilla y profunda, graciosa y trágica. Habilidosa para despertar la respuesta emotiva, sensible, de los espectadores, “Stefano’ también desencadena la risa y la reflexión filosófica y social. Es que Discépolo, nuestro Shakespeare rioplatense, sabe combinar de manera exquisita el humor y el dolor, el color local y el relámpago intelectual, lo cómico con lo trágico, la teatralidad con la vida misma. “Stefano’ es entonces una obra profundamente divertida, donde los espectadores se reconocen en el protagonista o en algún otro personaje, donde por un momento todos somos Stefano”, reflexionan los responsables de la puesta.
El autor
Armando Discépolo (1887-1971) inicia su labor autoral en 1910 con el estreno de “Entre el hierro y la cierra”, luego en 1934 con “Relojero”. Influenciado por Dostoievski, Andréiev y Tolstoi, se identifica con la dramática crispada del verismo italiano, que conducen a la madurez los grotescos pirandelleanos. Actor en sus inicios y exigente director después, Discépolo se constituye en dramaturgo y el gran creador del género argentino por excelencia: el grotesco criollo con obras como “Mateo”, “El organito” y, especialmente, “Stefano”.
El historiador teatral Luis Ordaz dice de “don Armando” (como lo nombraban respetuosa y cariñosamente quienes lo rodeaban): “Un Don Quijote a cara limpia, sin barba y sin bigote y con los ojillos brillantes, como semicerrados por la intensidad de la luz, y una sonrisa ingenua y franca, aunque asomaban ciertos esguinces de tristeza y amargura. Como si en la boca tuviese los fracasos y el mal sabor de la vida. Hondamente pesimista, sumamente emotivo y sentimental, Armando Discépolo resulta un personaje de su propia galería de grotescos. Un ser con la sensibilidad en carne viva y un espíritu anárquico, característico de los artistas e intelectuales inquietos de su época”.
El elenco
El grupo teatral De las Artes viene desarrollando una trayectoria continuada desde comienzos de los ‘90 generando verdaderos hitos teatrales como: “La casa de Bernarda Alba”, de García Lorca, en los patios del actual Solar de las Artes; “Quién nos quita lo bailado”, de Sergio Abbate; “La casa del campo”, de Edgardo Dib; “Cotillón”, de José María Muscari; y “Espina de diamante”, de Enrique Butti.
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